Por Dios, ¿cuándo se detendrá esto?
No entiendo qué carajos pasa, llevo 30 años viviendo en México (o sea, toda mi vida) y siempre ha sido lo mismo, con ligeros cambios, siempre de forma, nunca de fondo.
La televisión abierta en México es una basura asquerosa. Lo que el grueso de la gente ve es un carnaval repugnante de amarillismo, comercialidad, estupideces, banalización y vulgaridad; o en otras palabras DECADENCIA.
Televisa y Televisión Azteca nunca han hecho nada por detener semejante espectáculo, a cada hora, en cada canal encontramos emisiones que destacan en muchas cosas, la más importante la falta de calidad. Tomemos por ejemplo la programación matutina, en ambas cadenas se transmiten programas de revista con consejos de belleza, recetas de cocina, horóscopos o concursos; algunas repeticiones de novelas pero lo que más de entristece y molesta son los noticieros.
Esto es lo peor, no importa la hora ni el día, los noticieros mexicanos de las dos principales televisoras son amarillistas, parciales, alarmistas y poco profesionales, son distractores de la gente pues en vez de impulsar el que la gente se forme una opinión propia lo que hacen es distraerlos, alarmarlos, su expresión narrativa nos quiere hacer creer que es apelativa, no obstante desde el primer momento lo que busca es crear en el espectador la sensación de preocupación, alarma, angustia, con el sensacionalismo como fiel compañero de copas.
Es frecuente escuchar de boca de los merolicos que se dicen conductores y comunicadores cosas como " El precio de los alimentos sube y nada parece detenerlo" o "El narco ejecuta 4 personas", "Voraz carestía recorre el país, y no se vé para cuando se termine" y cuando presentan los respectivos "reportajes" siempre ponen un fondo musical que lo único que pretende es captar la atención de manera morbosa como si de una película de horror se tratase, cuyo único objetivo es difundir incertidumbre, anguistia.
Otra joya de la corona de esta vóragine absurdos y ridículos son sin duda alguna los programas de variedades y espectáculos. ¿Cuántas veces no se escuchan ahí los asuntos personales de los Artistas (¿De verdad las actrices y los conductores de reality shows, los luchadores y los comediantes hacen arte, para que se les llame así?) que más que crónicas parecen charlas de transporte público? ¿Para qué sirve, qué vacío llena el difundir la vida sexual y personal de Andrés García? ¿Qué utilidad tiene el saber que a un tal fabiruchis cuya cobardía le implusa a ocultar su homosexualidad fue golpeado en un hotel? ¿De verdad es provechoso, es cultura lo que se absorbe de esas noticias? ¿Qué educación, -corrijo- qué entretenimiento puedo sacar de las desventuras de gente obesa que no tiene ningún reparo en aparecer en televisión nacional para que todos los vean y critiquen su exceso de peso?
Lo único que se satisface es el morbo de la gente que desgraciadamente y por motivos sociales es poco educada, culta. Ni siquiera es entretenimiento, es una vulgarización, un espectáculo idiota. He llegado a lo que creo que también es un punto importante y como tal quiero decirlo:
La televisión mexicana es, además de mala y vulgar, una copia pésimamente realizada de la televisión gringa. se copia todo, principalmente sus reality shows y programas como Cops o los videos más asombrosos del mundo.
Si por casualidad no encontramos noticieros, programas de chismes o telenovelas pésimamente narradas, quiere decir que nos encontramos en un sábado con una cobertura excesiva y poco buena de los partidos de fútbol, películas mexicanas asquerosas o muy antiguas con actores como El Borras, Alfonso Zayas o Pedro Infante, repetidas hasta la saciedad. ¿Y si es domingo? pues la cosa es la misma con excepción de que en la mañana nos encontramos con el mítico Chabelo, cuyo programa de concursos y su singular catafixia dominan el horario matutino de 8 a 10.
Me entristece mucho ver la realidad televisiva mexicana, que de cierta forma es también reflejo de la gente, pues no hay forma de comparar sus noticieros y programas de concursos con los que se ven en Televisión Española, la BBC , La Deutsche Welle o la francesa TV5, llenos de calidad tanto técnica como periodística.
¿Qué alternativas existen para aquellos mexicanos que no nos conformamos y que rechazamos los cantos de sirena para satisfacer al populacho?
Son pocas. El canal 11 y el canal 22 que en algún momento fueron premiados por organismo internacionales como los mejores canales culturales del mundo tienen programación de calidad buena y aceptable, con producción propia y también comprada. Por desgracia el canal Once ha bajado un poco la calidad de su programación aunque también tiene programas de otro estilo como "Diálogos en confianza" o "Conversando con Cristina Pacheco" que son dignos y también merece la pena verlos.
De canal 22 no quiero hablar mucho. La mayoría de su programación son de producción comprada a otros países, y desde que la fundación Televisa ha invertido dinero ahí han comenzado una cuenta regresiva hacia la comercialidad absurda, baste con decir que las estupendas películas de arte e independientes que llegan a pasar ahí son -desgraciadamente- dobladas al español.
Y la otra alternativa, para quien se lo pueda permitir consiste en contratar algún sistema de cable y poder ver canales como Euronet, Euro, TVE, DW, BBC, que son muestra de televisión que entretiene, cultiva, educa y no por ello dejan de tener lucros.
En Cinempacho mostramos nuestra inconformidad hacia la televisión abierta mexicana.
ATTE.
Jefe Maestro.
Víctor Manuel García
Radio Boy
Cine-scrúpulos
P.D. Mil gracias a mi amigo Rodrigo, ex miembro de la Comcomics quien me sugirió este tema y me alentó a escribirlo.
Comentarios
Por cierto, tienes muchos visitantes extranjeros, que importante es tu blog mi buen vic
Un saludo, Rodrigo
Un abrazo Jefe
Algunas secciones de CNN en español también están bastante aceptables...
En general trato de no ver televisión... prefiero leer o poner una buena película (para lo cual tomo en cuenta tus excelentes recomendaciones)...
sobra decir que odio cada minuto de programación, que en un 70% es solo anuncio comercial de productos basura, y publicidad falsa, realmente da asco, nauseas.