Bladerunner: ¿Sueña Dios con humanos eléctricos?

Sean bienvenidos a esta nueva columna, donde hablaremos de cine, aunque no de cualquier tipo de cine, sino de ese tipo de cine que marca un referente, que deja una impresión indeleble.

Y pues qué mejor para inaugurar esta sección que una película que ha marcado toda una época dentro del cine a nivel mundial, y que a pesar de ser relativamente poco conocida por las grandes masas ha servido como fuente de inspiración para muchas otras películas, nos referimos por supuesto a Blade runner.



La colonización en otros planetas es un hecho palpable, En el año 2029 la humanidad ha alcanzado la cumbre tecnológica, prueba de ello radica en la fabricación de seres creados mediante ingeniería genética, es decir, ya es posible crear seres humanos sintéticos, más fuertes, más resistentes y con una inteligencia superior al promedio de la gente común.


Estos seres reciben el nombre de “replicantes” y son empleados en trabajos peligrosos y humillantes fuera del planeta tierra. Estos replicantes son fabricados por la Tyrell Corporation y carecen de la capacidad de controlar y manejar sus emociones. Tras un grave amotinamiento en el espacio donde hubo numerosas víctimas su presencia en la tierra es declarada como ilegal y deben ser “retirados” por elementos policíacos conocidos como Blade Runner; un pequeño grupo de estos replicantes llega ilegalmente a la tierra, y el detective Deckard (Harrison Ford) debe encargarse de ellos muy a su pesar.




La trama de la película se desarrolla en una caótica ciudad de Los Ángeles, cuyo entorno es el de un ambiente hosco, saturado, lleno de indiferencia y sumamente abrumado, reflejo de ello es la numerosa presencia de fábricas y elementos industriales, con una lluvia incesante, gente patética, egoísta. Todo esto transmite un palpable mensaje de apatía, abandono y sobre todo de desesperanza. Es el escenario perfecto para la historia de este filme, la dirección de Ridley Scott es precisa y sobre todo elegante, esto aunado al diseño de producción hecho por Syd Mead aporta un grado de exquisitez visual poco común en cualquier película, a pesar de ser una película de ciencia ficción muchos cuestionamientos son creíbles, tales como los límites éticos a los que una persona le es legítimo llegar por medio de la tecnología.

Los personajes están muy bien estructurados tanto en caracterización como interpretación, destaca por ejemplo la del villano principal (Rutger Hauer) cuyos motivos aunque moralmente cuestionables no dejan de tener razón de ser, es inevitable no sentir empatía por él, lo único que anhela es una oportunidad de experimentar, vivir y sentir al menos como una persona común, esto le está prohibido pues como replicante carece del derecho a ser catalogado como persona, ¿Acaso los hombres somos los únicos que tenemos derecho a sentir, a sufrir?


Las metáforas están por doquier, igual que los simbolismos, colores, sonidos, es necesario digerir esta obra con calma, generalmente se disfruta y se aprecia mejor cuando se ve más de una vez.

El guión está muy bien escrito y se enriquece todavía más al estar basado en una estupenda obra literaria, ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? del ya desaparecido Phillip K. Dick, muchas de sus obras ha sido llevadas ya a la pantalla grande (como Minority Report) además que la adaptación para el cine fue hecha magistralmente por Hampton Fancher y David Webb Peoples.



Es inevitable no hacer mención del magnífico Soundtrack con el que cuenta la película, pues sin duda aporta un elemento de identidad único, cada tema se acopla a la perfección, sin duda Vangelis estuvo en el éxtasis de la inspiración al momento de componer la música para esta película.

Bastante incomprendida en su estreno original, fue injustamente atacada debido a que rompía con muchos estándares de la época, sobre todo con el cine Hollywoodense, en aquel entonces (y aún hoy, lamentablemente) se relaciona el fracaso comercial con la falta de calidad en la técnica y contenido, sus pobres ingresos en taquilla contribuyeron a que la crítica “especializada” la despedazara sin piedad cuando es un ejemplo indiscutible de que el destino otorga a sólo a los que lo merecen un lugar en los pedestales más altos de la fama.

Así que no lo duden, esta es una película que a juicio de un servidor es obligatorio ver por lo menos una vez en la vida, además de que contribuyó enormemente a difundir el término Cyberpunk, no hablamos de una película común, de verdad vale la pena el tiempo que inviertan en verla, no por nada se ha ganado a pulso el título de película de culto.

Ficha Técnica:

Dirección: Ridley Scott

Reparto: Harrison Ford, Rutger Hauer, Sean Young, Darryl Hanna,Edward James Olmos.

Producción: Michael Deeley, Hampton Fancher, Brian Kelly, Jerry Perenchio, Ivor Powell, Run Run Shaw, Bud Yorkin

Guión: Hampton Fancher, David Webb Peoples; basado en la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? De Phillip K. Dick.

Música: Vangelis.

País: Estados Unidos.

Año: 1982.

Género: Ciencia Ficción.


Visita el link si quieres más información: http://www.geocities.com/Area51/Crater/4909/

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