Bad Lieutenant

En estas fechas en México es posible asistir al cine y ver que en cartelera está en exhibición la película Bad Lieutenant dirigida por Werner Herzog y protagonizada por Nicolas Cage. A pesar del nombre tras de sí del director que este filme tiene me he resistido a verla por que quien dirige no es Abel Ferrara y quien actúa no es Harvey Keitel. ¿Por qué digo esto? muy fácil, por que los remakes casi nunca me dejan satisfecho y esta película mis gentiles lectores es eso, un remake.

Por esta razón siento que es el pretexto perfecto para hablar de la película original estrenada en 1992 y que causó gran controversia al momento de su estreno y que en México pasó prácticamente desapercibida tanto en proyección como su exhibición en video, relegándole la importancia y valor de esta obra fílmica ya que a mi juicio es una de las mejores películas de los 90's a nivel mundial, por lo que para algunos de nosotros es una película de culto.

Abel Ferrara quien ha sido descrito como un provocador y poeta maldito del cine nos muestra una obra cruda, directa sucia y que se desenvuelve sin tapujos; ello se magnifica con la incréible e impresionante interpretación del protagonista a manos de Harvey keitel, cuyo personaje es un detective policiaco Neoyorkino que no tiene la más mínima noción de lo que simbólicamente un personaje así representaría en condiciones "normales".

Para sustentar mi afirmación anterior puedo decir que las características más fuertes del personaje de Keitel yacen en la proyección de un hombre a quien poco le importa su vida familiar, su trabajo lo hace de mala gana y siempre trata de terminarlo por la vía más fácil, cómoda y rápida, que no tiene tapujos en ser un adicto a las drogas y al juego, que duerme con mujerzuelas y reacciona violentamente la mayoría de las veces aún en situaciones poco difíciles. En pocas palabras además de policía es un hombre corrupto en todo sentido. Esta corrupción que define por completo al teniente corrupto y que lo tiene más que satisfecho se enfrenta a un conflicto existencial muy fuerte pues se siente profundamente consternado al investigar la abominable violación de una monja; siente que su suerte está atada a este hecho y que no es mero azar el que lo pone en esta escena.

Es aquí donde podemos apreciar la firma que ha distinguido a Abel Ferrara a lo largo de su carrera como cineasta, siempre ha gustado de utilizar elementos e iconos religiosos cuyo uso rayan en la obsesión, lo mismo que el libertinaje y las adicciones, elementos que quizá tienen detrás un mensaje que grita a pulmón abierto que cualquiera es vulnerable a caer en lo más bajo, en la suciedad y la fuerza de la violencia, en un camino que no todos pueden sortear.

Quizá por todo esto y al no ser una película políticamente correcta fue tanto director como actor no figuraron increíblemente en la lista de nominaciones del 92', pues Teniente Corrupto o Corrupción Policial como se le conoce en español es un proyecto atrevido, arriesgado, que necesitaba de un par de valientes que lo concibieran y lo vieran nacer aún a costa de ser prácticamente ignorados por las grandes masas corrompidas por los convencionalismos fílmicos de las grandes casas productoras más interesadas en promover un producto de consumo que en mostrar las inquietudes e ideologías de actores y directores.



Quizá la nueva obra sea más vista, quizá Nicolas Cage haga una interpretación decente, quizá esta película tenga elementos de interés, quizá puedan suceder muchas cosas, pero es muy difícil recrear el espíritu e inspiración una obra sobre todo cuando ha pasado mucho tiempo.